27 febrero 2010

Defensa

- Un profeta - (Jacques Audiard, 2009)




A los que no habitamos en ese país tan amado y odiado llamado Francia se nos vende una imagen especifica de ese lugar a veces equivocada. Glamour, intelectualidad y finura es la marca made in France que intentan que compremos. Pero las noticias (que, a veces, es otra forma de ficción) nos trasladan a la Francia de los conflictos raciales, la difícil convivencia y la violencia. Por eso para mostrarnos esta realidad tenemos que irnos a un microcosmos particular como puede ser una cárcel. En esta ocasión, la cárcel de Un profeta.

La película de Jacques Audiard es toda una metáfora en si misma de cómo un extranjero sin cultura ni (aparente) inteligencia consigue sobrevivir en un entorno hostil a base de las lecciones de la vida. En esta ocasión la cárcel es un reflejo de lo que puede ser una sociedad cualquiera repleta de peligros y donde sobrevivir puede ser una cuestión de instintos, sagacidad y suerte. Un profeta funciona como un perfecto reloj de dos horas y media con un ritmo que no desfallece ni un solo minuto. Muchos directores norteamericanos llamados “artesanos del espectáculo” deberían aprender de Un profeta para saber construir una historia que no aburre en ningun momento. Pero Audiard es un tipo listo porque sabe que no sólo de ritmo narrativo vive el hombre (cinéfilo). Un profeta se convierte en el ejemplo perfecto de que una buena película se puede trabajar teniendo los elementos idóneos. Lo más destacable es la gran interpretación de Tahar Rahim que apareciendo prácticamente en todos los segundos del film sabe como hacer evolucionar su personaje que pasa de tener miedo y ser ignorante a ser poderoso y con fuerza. Y todo ello con una economía gestual encomiable. Y luego están las magnificas aportaciones secundarias de Niels Arestrup o Adel Bencherif, la utilización de la música de Alexandre Desplat o un guión de hierro escrito por Thomas Bidegain y el propio Audiard. Con cada cosa en su sitio se logra una estructura casi sin fisuras.

Un profeta es cine negro, en la mejor tradición del polar francés del cual Jacques Audiard se ha convertido en el gran heredero. También es cine social que habla sobre las raíces de cada persona que, al final, acaban siendo algo vital en nuestra vida sea como sea ésta. Pero lo que acaba siendo Un profeta es una película sobre el ser humano y sus límites (o falta de ellos) cuando se trata de sobrevivir. Al final sea lo miserable que sea tu vida de lo que va esto es de llegar al final y es lo que enseña Un profeta. Un (supuesto) cordero sobreviviendo en un manada de lobos. Y no hace estar en una carcel francesa para tener esa sensación de intentar sobrevivir. Por eso, Un profeta acaba siendo una gran película educativa.

Lo mejor: el "profeta" Tahar Rahim

Lo peor: algunas imagenes metafóricas pueden chocar con el resto de la película

. La mala educación (Jordi Costa, El País)

. Dos profetas. Y a uno de ellos vale la pena seguirle (Rafa Martín, Las horas perdidas)

. La cárcel como escuela y trampolín (Oti Rodríguez Marchante, ABC)

20 febrero 2010

Bendita locura

- Shutter Island - (Martin Scorsese, 2010)  

El aviador era una propuesta realmente interesante. No sólo por contar la apasionante vida de Howard Hughes sino que toda esa historia la iba a contar Martin Scorsese. Teníamos toda su potencia visual y narraiva al servicio de la historia de un mito contemporáneo. El resultado fue bonito, pañado pero sin pasión. Algo mas tenía de pasión tenía Infiltrados pero se volvia a repetir la sensación de que Scorsese se había vuelto funcional al rodar películas y ya no había esa creatividad de antaño. Quizá fracasos comerciales como las fantásticas Al límite y, en menor medida, Gangs of New York le habían hecho reflexionar de que si quería rodar debería dejar de ser menos Scorsese. Pero otra teoría pasea por mi mente. Tras librarse de la dichosa, molesta y absurda losa de no tener un Oscar, Scorsese necesitaba encontrarse con si mismo. Un proyecto donde pudiera darse el gustazo de simplemente dirigir. Sin cortapisas ni reglas. Y una película sobre la locura era el idóneo en este momento de su carrera.

Porque Shutter Island no es una historia sino el delirio de un genio creativo. La película es una excusa para que Scorsese se libere de toda la represión que ha tenido durante los últimos años y explore los límites de la dirección. Vuelve el frenesí, la música a todo volumen, el ritmo endiablado, homenajes al cine clásico... toda una colección de postales que mezclan los colores vivos con la oscuridad más absoluta. Y Scorsese sólo podía realizar una película con un argumento cercano a su delirio como director. Por mucho que este basado en una novela de Dennis Lehane del argumento hay que olvidarse. Es más si nos interesa algo las interrogantes del film se pueden adivinar perfectamente a los veinte minutos de inicio de Shutter Island. Todo es una excusa. Un perfecto Leonardo Di Caprio ejerce de guía dentro de la mente de uno de los grandes talentos cinematográficos del siglo XX. Shutter Island habla de la recuperación de Scorsese como director y creador. Cada plano, cada secuencia es un experimento que va más allá del anterior y el resto (actores, guión, argumento...) son títeres. Al final lo que importa de Shutter Island es el delirio y la locura con que Scorsese coge una historia sin pies ni cabeza y la hace suya. Shutter Island no es ni más ni menos que la terapia de un creador que nos utiliza (a los espectadores) como cobayas. Y el espectador (seguramente la mayoría) disfrutamos de lo lindo adentrándonos en la mente de un genio. Porque Shutter Island es nada más ni nada menos que un fantástico experimento.

. En el laberinto de la culpa (Julio R. Chico, La mirada de Ulises)

. Pulp Scorsese (Samuel Pérez Moreno, Tío Oscar)

. La enigmática isla tridimensional (Sergio Roma, Cinebulosa)

19 febrero 2010

/ VR23 / Oscars 2010 (II)

El 7 de marzo se entregaran los Oscars. Por ese motivo Vivir Rodando saca el esmoquin y hace de pitoniso dedicando el programa del 18 de febrero a analizar los ganadores (y perdedores) de la próxima edición de los premios emblemas del cine mundial. Para ello contamos con el que más sabe cuando hablamos de premios y estatuillas, Nacho Gonzalo, administrador de la web de Lo que yo te diga. Si te interesa ver el futuro escucha el último Vivir Rodando.

Para escuchar o descargar el programa pincha en:

11 febrero 2010

Realidades y esperanzas de los XXIV Premios Goya



MEJOR PELÍCULA

ME GUSTARÍA QUE GANARA: Celda 211 / AL FINAL GANARÁ: Celda 211

La película del año, en una temporada extraña. Se ha llevado el favor del público y de la mayoria de la crítica. Su victoria indicaría que cuando se hacen las cosas bien la justicia prevalece.

MEJOR DIRECCIÓN

ME GUSTARÍA QUE GANARA: Daniel Monzón (Celda 211) / AL FINAL GANARÁ: Daniel Monzón (Celda 211)

Categoría complicada. Mucho gran nombre, prestigio y taquilla se juntan en los nombres de Campanella, Trueba y Amenábar. Pero, de una u otra forma, ya han sido reconocidos, por eso el premio sería para alguien que ha sabido armar una película que ha llevado al público a las salas.

MEJOR DIRECCIÓN NOVEL

ME GUSTARÍA QUE GANARÁ: Borja Cobeaga (Pagafantas) / AL FINAL GANARA: Mar Coll (Tres días con la familia)

Si la de dirección es complicada ésta lo es mucho más. Principalmente porque no se entiende que alguno de los nominados no esté en la categoría de mejor dirección. El prestigio que está alcanzando Tres días con la familia hace que Mar Coll sea algo más favorita que el resto. Aunque yo me quedo con el talento cómico de Cobeaga.

MEJOR INTERPRETACIÓN MASCULINA PROTAGONISTA

ME GUSTARÍA QUE GANARA: Luis Tosar (Celda 211) / AL FINAL GANARÁ: Luis Tosar (Celda 211)

Malamadre, Malamadre, Malamadre... Ese personaje se ha venido repitiendo desde el estreno de Celda 211 y ha sido clave para arrastrar a tanta gente a ver el film. Se rumoreo que Jordi Mollá podría hacerle frente pero no parece que le haga ni cosquillas.

MEJOR INTERPRETACIÓN FEMENINA PROTAGONISTA

ME GUSTARÍA QUE GANARA: Lola Dueñas (Yo, también) / AL FINAL GANARÁ: Lola Dueñas (Yo, también)

Lola Dueñas contra las stars (Cruz, Weisz y Verdú). Y no sería de extrañar que ganara ella. Penélope simplemente está bien en Los abrazos rotos, no es de Weisz de lo que más se ha hablado cuando la gente se ha referido a Ágora y Tetro queda muy lejos. Y Lola Dueñas se ha llevado todos los aplausos desde la aparición del film en el Festival de San Sebastián.

MEJOR INTERPRETACIÓN MASCULINA DE REPARTO

ME GUSTARÍA QUE GANARA: Antonio Resines (Celda 211) / AL FINAL GANARÁ: Ricardo Darín (El baile de la victoria)

Es una categoría donde destacan más la ausencias (Francella, Rago, José Luis Gómez...) que los nominados. Al estar tan abierta y ser tan extraña el premio podría ir por motivos extracinematográficos (como suele pasar). Hay muchas ganas de premiar a Darín y decirle que es “uno de los nuestros”.

MEJOR INTERPRETACIÓN FEMENINA DE REPARTO

ME GUSTARÍA QUE GANARA: Vicky Peña (El cónsul de Sodoma) / AL FINAL GANARÁ: Marta Etura (Celda 211)

A Marta Etura le pondría un piso, una estatua y lo que quisiera... Es maravillosa, una actriz descomunal, con un talento inconmensurable...pero su nominación no se comprende muy bien. Es un papel sin peso en la película que sirve de excusa para un giro argumental absurdo de Celda 211. Pero es la favorita porque hay ganas de premiarla.

MEJOR ACTOR REVELACIÓN

ME GUSTARÍA QUE GANARA: Alberto Ammann (Celda 211) / AL FINAL GANARÁ: Alberto Ammann (Celda 211)

Si Tosar está descomunal en Celda 211 poco que decir de su partenaire en el film de Monzón. Alberto Ammann le aguanta el tipo a Tosar en todo el metraje y se convierte en un duelo de tú a tú. Se siente por el divertido Gorka Otxoa

MEJOR ACTRIZ REVELACIÓN

ME GUSTARÍA QUE GANARA: Soledad Villamil (El secreto de sus ojos) / AL FINAL GANARÁ: Soledad Villamil (El secreto de sus ojos)

No voy a insistir en lo mismo que se ha dicho mil veces. Que Soledad Villamil es muy conocida, una estrella en Argentina desde hace años, que es una locura que sea nominada en la categoría de revelación... Simplemente hay que decir que sería un premio muy merecido se revele o no se revele...a no ser que Nausicaa Bonnin o Leticia Herrero quieran decir lo contrario

MEJOR GUIÓN ORIGINAL

ME GUSTARÍA QUE GANARA: Los abrazos rotos (Pedro Almodóvar) / AL FINAL GANARÁ: Ágora (Mateo Gil y Alejandro Amenábar)

Vale, ni es el mejor guión ni la mejor historia de Almodóvar. Pero debo reconocerle que sus abrazos rotos tienen ideas interesantes...aunque estén deslavazadas. Aunque el premio estará entre Sánchez Arévalo y la pareja Amenábar / Gil. La ausencia de Borja Cobeaga y su Pagafantas es demencial.

MEJOR GUIÓN ADAPTADO

ME GUSTARÍA QUE GANARA: Celda 211 (Daniel Monzón y Jorge Garricaechevarría) / AL FINAL GANARÁ: Celda 211 (Daniel Monzón y Jorge Garricaechevarría)


Mucha gente ha destacado el inteligente (aunque con alguna trampa perdonable) guión de El secreto de sus ojos. Otros lo han hecho por la fuerza y originalidad de Celda 211 (con una trampa menos perdonable). Dos estupendos trabajos.

MEJOR MÚSICA ORIGINAL

ME GUSTARÍA QUE GANARA: Celda 211 (Roque Baños) / AL FINAL GANARÁ: Celda 211 (Roque Baños)

¿Va a intentar la Academia salvar la cara a Los abrazos rotos premiando a su estrella Alberto Iglesias? No sería la primera vez. A lo mejor prefiere consolidar en su star sistema particular a Roque Baños y proclamarlo como el heredero. Pinta que puede ser lo último.

MEJOR CANCIÓN ORIGINAL

ME GUSTARÍA QUE GANARA: "Yo, también”, de Guille Milkway (Yo, también) / AL FINAL GANARA: : "Yo, también”, de Guille Milkway (Yo, también)

Guille Milkway (La casa azul) participa con una canción de la película Yo, también. Poco que decir. Aunque para premiarle a los académicos les debería gustar la música o escuchar las canciones que participan. Cosa complicada en este país. Aunque hay esperanzas viendo algunos rivales que tiene.

MEJOR DIRECCIÓN DE PRODUCCIÓN

ME GUSTARÍA QUE GANARA: Celda 211 (Alicia Tellería) / AL FINAL GANARÁ: Ágora (José Luis Escolar)

El gigantesco proyecto de Amenábar tendrá su merecido premio con este goya que premiará las dificultades de crear una película como Ágora.

MEJOR FOTOGRAFÍA

ME GUSTARÍA QUE GANARA:After (Alex Catalán) / AL FINAL GANARÁ: Ágora (Xavi Giménez)

En previsión que Ágora acabe perdiendo varios premios ante el film de Daniel Monzón, la Academia puede comenzar a darle varios premios técnicos. Y el estupendo trabajo de Giménez podría verse recompensado. La nominación del fantástco trabajo nocturno de Alex Catalán debería convertirse en premio.

MEJOR MONTAJE

ME GUSTARÍA QUE GANARA: Celda 211 (Mapa Pastor) / AL FINAL GANARÁ: Celda 211 (Mapa Pastor)

Si (REC) destacó por su potente montaje el año apasado es incoherente que (REC) 2 no esté en esta terna final. El consuelo sería la victoria del vigoroso trabajo de Mapa Pastor en Celda 211.

MEJOR MAQUILLAJE Y PELUQUERÍA

ME GUSTARÍA QUE GANARA: Ágora (Jan Sewell y Suzanne Stokes-Munton) / AL FINAL GANARÁ: Ágora (Jan Sewell y Suzanne Stokes-Munton)

Lo dicho. El excelso trabajo de ambientación de Ágora comenzará a dar sus frutos en cuanto a premios se refiere. Y recordemos como les gusta a los académicos premiar a películas historicas en estos apartados.

MEJOR DIRECCIÓN ARTÍSTICA

ME GUSTARÍA QUE GANARA: Ágora (Guy Hendrix Dyas) / AL FINAL GANARÁ: Ágora (Guy Hendrix Dyas)


Muy merecido premio para la recreación perfecta de una época clásica con los medios del siglo XXI.

MEJOR DISEÑO DE VESTUARIO

ME GUSTARÍA QUE GANARA:Los abrazos rotos (Sonia Grande) / AL FINAL GANARÁ: Ágora (Gabriella Pescucci)


Elementos para el premio de Ágora, el gran trabajo de recreación histórica y que en estos apartados gusta mucho tirar de “cuanto más antiguo, mejor”. Yo me quedo con lo contemporáneo de Los abrazos rotos.

MEJOR SONIDO

ME GUSTARÍA QUE GANARA: Celda 211 (Sergio Burmann, Jaime Fernández y Carlos Faruolo) / AL FINAL GANARÁ: Celda 211 (Sergio Burmann, Jaime Fernández y Carlos Faruolo)


Entre Ágora y Celda 211 se debatirá la cosa. Aunque este premio técnico pinta que vaya para la saca de Celda 211.

MEJORES EFECTOS ESPECIALES

ME GUSTARÍA QUE GANARA: (REC) 2 (Álex Villagrasa y Salvador Santana) / AL FINAL GANARÁ: Ágora (Félix Berges y Chris Reynolds)

Sigue el espectáculo. Lo grandioso de Ágora se refleja en unos cuidados efectos especiales. Posibilidades para Spanish Movie aunque uno se queda con el trabajo de guerrilla de (REC) 2

MEJOR PELÍCULA EUROPEA

ME GUSTARÍA QUE GANARA: La clase, de Laurent Cantet (Francia) / AL FINAL GANARÁ: Slumdog Millonaire, de Danny Boyle (Gran Bretaña)


Me duele que Déjame entrar vuelva a quedar fuera de un gran premio pero esa lección magistral de Laurent Cantet merece todos los premios. Los académicos no van mucho al cine y quizá opten por lo fácil.

MEJOR PELÍCULA HISPANOAMERICANA

ME GUSTARÍA QUE GANARA: El secreto de sus ojos, de Juan José Campanella (Argentina) / AL FINAL GANARÁ: El secreto de sus ojos, de Juan José Campanella (Argentina)


El secreto de sus ojos ha gustado a críticos y público por igual. Pero su condición de más argentina que española hará que se vaya de vacío. Por eso este premio no tiene discusión.

GOYA DE HONOR: Antonio Mercero

Arrasó en audiencia con producciones muy distintas (La cabina y Farmacia de guardia). Supo hacer industria y cine al mismo tiempo. Un tipo con cabeza y talento para lo de hacer cine y televisión. Homenaje merecido.

Los XXIV Premios Goya se darán el 14 de febrero a las diez de la noche en una ceremonia retransmitida por TVE y presentada por Andreu Buenafuente. Para ver la lista completa de nominados pincha aquí.

06 febrero 2010

Opiniones de cine: Con el mar hemos topado, por Virginia Mendoza

Ponyo en el acantilado es amor convertido en un nudo en la garganta. Un ejemplo de cómo los sentimientos más inocentes puede provocar tsunamis. De cómo el mar nos arrebata todo lo que de él nos quedamos. De cómo todo vuelve si supimos protegerlo mientras estuvo en nuestras manos. De que no todas las sirenas tienen cola de pescado. Es una historia que tiene mucho que enseñar, a los niños y a los que lo fuimos, con la que podemos realizar una regresión a nuestros años más tiernos y ver que aún queda algo de aquella bondad con la que el mundo nos miraba entonces.

Ponyo es una niña pez que vive en las profundidades del mar con su padre Fujimoto, un hechicero maligno; su madre, una diosa marina; y sus incontables hermanas. A pesar de las diferencias entre la inocente Ponyo y su padre, ambos comparten el hecho de haber renunciado a su condición. Él por odio, ella por amor. Cuando Ponyo llega a la orilla atrapada en un bote de cristal, Sosuke, un niño de su edad se queda con ella y promete protegerla siempre. Pero, por petición de su padre, el mar regresa a buscarla y la devuelve a sus entrañas. Ponyo quiere ser humana para vivir con Sosuke, pero para ello tendrá que hacer un gran esfuerzo: renunciar a sus poderes mágicos.

Colores pastel se combinan a la perfección sobre personajes entrañables, más si cabe en la versión original. Los diálogos se hacen esperar, y el movimiento del padre de Ponyo en ocasiones peca de forzado; pero aún así, la vista no puede abarcar tanta belleza. Sin duda, un regalo para los ojos con el que el “Walt Disney japonés”, Hayao Miyazaki, nos recuerda quien es y dónde se sienta. La banda sonora tampoco falla, y es que el compositor no es cualquiera. Joe Hisaishi ha trabajado con Miyazaki en La princesa Mononoke, El viaje de Chihiro y El castillo ambulante. Este prolífico compositor de bandas sonoras ganó el Oscar por sus partituras en Despedidas en la pasada edición. Ternura por los cuatro costados, al igual que toda la cinta, es lo que desprende la canción del final. Cuando escuches “Ponyo, Ponyo, Ponyo es una niña pez”, no podrás sacar ese sonido de tu mente. Ni sentirás la necesidad de hacerlo.

Gake noue no Ponyo fue seleccionada hace unos meses por la Academia entre las veinte películas que pasaron el primer corte, aunque la cinta es de 2008. La selección final ha dejado fuera a Ponyo en el acantilado, siendo las cinco candidatas al premio Mejor película de animación: Coraline, Fantastic Mr. Fox, The princess and the frog, The secret of kells y Up. Hayao Miyazaki ya se hizo con la estatuilla por El viaje de Chihiro en 2002, mientras que El castillo ambulante estuvo nominada en 2005.

* Virginia Mendoza es periodista y autora de los blogs Crear en tiempos de crisis y Crisis de claridad